La decisión de comprar o alquilar una vivienda es una de las más importantes a la que muchas personas se enfrentan a lo largo de su vida. Con un mercado inmobiliario en constante cambio, ¿será mejor comprar o alquilar una vivienda en 2025?
Comprar una vivienda en 2025
Precios de la vivienda en aumento
El desequilibrio entre oferta y demanda seguirá siendo el principal impulsor de los precios. En el mercado de compra, se espera un aumento promedio del 7% en 2025, con subidas más significativas en la vivienda nueva, donde se podría superar el 15%.
Tipos de interés más bajos en hipotecas
Como comentamos en el artículo “Impacto de la bajada de tipos de interés en el mercado hipotecario”, El Banco Central Europeo (BCE) cerró 2024 con un nuevo recorte de los tipos de interés, situándose en un 3%. Por su parte, el Euríbor cerró en un 2,436%.
Esta medida está teniendo un impacto significativo en el mercado hipotecario, ya que afecta tanto a las condiciones de financiación como a la demanda de vivienda, facilitando el acceso al mercado a las familias.
La mejora en las condiciones hipotecarias previstas para 2025 impulsará la demanda de vivienda, permitiendo que más familias accedan al mercado. Sin embargo, este aumento en la demanda se encontrará con una oferta que no crece al mismo ritmo, intensificando el desequilibrio entre ambas.
Más ahorros necesarios para la entrada de la vivienda
Con el aumento de los precios, los compradores necesitarán más ahorros para cubrir la entrada (en caso de que no se financie el 100% de la vivienda) y los gastos asociados a la compraventa (notaría, tasación, impuestos, etc.)
Cuota hipotecaria vs. Alquiler
La cuota hipotecaria media podría ser más baja que la renta mensual de alquiler. Por ejemplo, una hipoteca media en España podría tener una cuota de 708 euros, mientras que el alquiler de una vivienda de 80 metros cuadrados podría costar 1.050 euros mensuales.
Alquilar una vivienda en 2025
Precios del alquiler en máximos históricos
En 2024, el precio medio del alquiler en España superó los 13 €/m2, marcando un incremento interanual del 14,7%, el más alto detectado en los últimos 18 años.
La demanda en el mercado de alquiler supera con creces la oferta disponible, agravada por medidas intervencionistas como los límites de precio, que han reducido la rentabilidad y desincentivado a los propietarios a mantener sus viviendas en el mercado.
Escasa oferta de pisos en alquiler
La oferta de pisos en alquiler es insuficiente para la demanda, lo que podría seguir aumentando los precios y dificultando el acceso a la vivienda.
La aprobación de la Ley de la Vivienda ha generado tensiones en este contexto. La regulación de los precios del alquiler en las zonas tensionadas ha provocado que los propietarios dejen de poner sus inmuebles en alquiler, optando por otras alternativas como el alquiler turístico o la venta.
Esto crea un círculo vicioso donde la falta de oferta y las limitaciones legales contribuyen a empeorar el acceso al alquiler, en lugar de mejorarlo.
Factores clave para decidir si comprar o alquilar
Tu capacidad de ahorro. Para comprar necesitarás unos ahorros mínimos para cubrir, al menos, los gastos asociados a la compraventa.
Tu estabilidad laboral y personal. Si tienes un empleo fijo y planeas quedarte en la misma zona a largo plazo, comprar podría ser más conveniente.
Evolución de los precios de la vivienda. Analiza la relación entre el precio de compraventa y alquiler en tu localidad. En zonas donde los alquileres son muy altos, comprar podría resultar más rentable.
¿Qué es mejor comprar o alquilar en una vivienda 2025?
No hay una respuesta única. La mejor opción dependerá de tu situación económica, laboral y personal.
Comprar en 2025 tiene ventajas significativas. Una de ellas es que construirás un patrimonio propio, lo cual es una inversión para el futuro. Además, en muchos casos, las cuotas hipotecarias son más bajas que los alquileres actuales, lo que puede hacer que sea una opción más económica a largo plazo. También ofrece una estabilidad a largo plazo, ya que no estarás sujeto a renovaciones de contrato, y te da la libertad de personalizar tu hogar según tus gustos y necesidades.
Por otro lado, alquilar en 2025 tiene ventajas que pueden ser atractivas para ciertos perfiles. Una de ellas es la mayor flexibilidad para cambiar de vivienda o ubicación, ideal para quienes valoran la movilidad. Además, la inversión inicial es mucho menor, ya que solo se necesita cubrir la fianza y las primeras mensualidades. También está la ventaja de no tener que asumir los gastos de mantenimiento ni los impuestos de propiedad, que recaen en el propietario.
No obstante, los precios de los alquileres están en niveles muy altos, especialmente en las grandes ciudades, lo que puede suponer una carga financiera considerable.